Me llamo Laura y me apasiona la fotografía. Desde hace muchos años... he dado muchas vueltas sin saber a dónde ir exactamente, hasta que llegó a casa Tita, una mestiza recogida de la calle que cambió mi vida y unos tiempos más tarde Sansa para revolucionarnos con su energía. A través de ellas y sin querer, nace este proyecto dirigido a aquellas personas que ven sus animales como uno más de la familia, como compañeros de vida. Para mí, la palabra 'mascota', no define mi trabajo... realmente lo que quiero es transmitir el amor verdadero y sin condiciones entre el humano y el animal mediante la fotografía.